Inf. Epidemiológica

Hepatitis B. Epidemiologá y situación mundial

 

 

 

 

 

HEPATITIS B

 

Epidemiología y Situación mundial (2012)

 

 

 

 

EPIDEMIOLOGÍA

La Hepatitis B es una de las enfermedades más importantes a nivel mundial en la actualidad. Constituye un serio problema de Salud Pública en todo el planeta, a pesar de disponerse de una vacuna eficaz y segura desde 1982. El agente etiológico es el Virus de la hepatitis B (VHB), que es un ADN virus de la familia Hapadnaviridae. Está compuesto por una parte central o core rodeada de una cubierta portadora de la especificidad antigénica (Ag HBs). El core, además del genoma vírico, consta de una proteína central o nucleocápside que porta 2 antígenos víricos, el antígeno c (Ag HBc) y el antígeno e (Ag HBe).

La infección por Hepatitis B puede cursar clínicamente como una enfermedad aguda o pasar inadvertida, de forma asintomática o paucisintomática (50% de los casos). La hepatitis clínica aguda a su vez puede tomar forma fulminante (0,1%), ictérica (20%) o anictérica (30%). En general, el cuadro es de comienzo lento e insidioso, caracterizado por astenia, anorexia, malestar general, dolor abdominal, vómitos y puede aparecer ictericia. Años después pueden desarrollarse complicaciones en el caso de infección crónica del virus, como la aparición de cirrosis y/o hepatocarcinomas.

El diagnóstico de sospecha es clínico, apoyado en pruebas de laboratorio (pruebas de función hepática), pero el diagnóstico de confirmación se realiza mediante técnicas de medición de anticuerpos anti-VHB y de antígenos virales en sus distintos tipos (s, c y e). El diagnóstico directo por demostración del virus es costoso y difícil, por lo que no suele utilizarse rutinariamente.

El único reservorio y fuente de infección son los seres humanos, concretamente aquellos que son portadores crónicos del virus, que lo pueden ser desde unos pocos meses después de la infección a serlo durante toda su vida.

La transmisión se puede dar por distintas vías. Puede ser vertical (de madre, Ag HBS positiva, a hijo durante el embarazo o en el parto) u horizontal, ya sea por contacto directo persona a persona o por medio de objetos contaminados. Se pueden considerar los siguientes mecanismos dentro de la transmisión horizontal: transmisión sexual, inoculación directa a través de piel y mucosas (ADVP, transfusiones sanguíneas, pinchazos o cortes accidentales con objetos contaminados,..)y la transmisión intrafamiliar y por contacto íntimo en general (contacto con secreciones, uso común de utensilios de riesgo personales...). En áreas de alta endemia la transmisión se produce sobre todo en la infancia y por contacto familiar, sobre todo con madres portadoras del AgHBs. Los niños se infectan en el embarazo, en el nacimiento o por la convivencia con la madre en el primer año de vida. En estos países el 30-50% de los niños infectados han adquirido la infección perinatalmente. En los viajeros el riesgo de hepatitis B es bajo para los turistas de corta estancia, sin embargo, se asocia con comportamientos de riesgo, siendo elevada la transmisión sexual, un claro riesgo en los viajeros, particularmente en algunos destinos en zonas de alta endemicidad. También presentan un riesgo mayor los viajeros frecuentes, a largo plazo o aquellos que por razones médicas pueden necesitar tratamiento en el extranjero, así como el posible riesgo laboral (Ej.: los trabajadores sanitarios y humanitarios)

 

El periodo de incubación de la enfermedad aguda oscila entre 45 a 180 días .El periodo de transmisibilidad es muy variable, mientras se es portador del virus, que puede ser desde unos meses a toda la vida. Destacar que la transmisibilidad de esta infección es entre 50 y 100 veces superior a la del VIH, como otro ejemplo de enfermedad transmisible por las mismas vías.

La susceptibilidad a infección es universal, aunque existe inmunidad en casos de infección previa o por vacunación. En la respuesta a la primoinfección, la mayoría de los adultos presentan una reacción inmunológica humoral que contribuye a la eliminación del virus y una respuesta celular que elimina las células infectadas, resolviéndose así la enfermedad y no llegando a cronificarse, salvo en un 10% de los casos. En los niños, si la infección se adquiere intraútero o poco después de nacer, la débil respuesta de las células T condiciona una respuesta distinta, cronificándose un 90% de los casos. Las hepatitis que debutan de forma fulminante parecen estar en relación a una respuesta inmune exagerada.

 

SITUACIÓN MUNDIAL

Según la OMS aproximadamente 2.000 millones de personas se han infectado por el virus de la hepatitis B, y de ellos más de 360 millones son portadores crónicos del virus. Sobrevienen más de 50 millones de infecciones nuevas al año y mueren más de 600.000 de personas por la enfermedad o sus consecuencias.

La mayor parte de los casos se dan en países en desarrollo, sobre todo en niños, con el agravante de que en muchos países no es posible vacunar de forma sistemática, por problema de costos, aunque estos se han ido reduciendo significativamente en los últimos años. Este problema ha sido abordado por la OMS y otras organizaciones y a partir de 2008, 177 países habían incorporado vacuna contra la hepatitis B como parte integrante de los programas nacionales de vacunación infantil.

A grandes rasgos se puede valorar la distribución de la hepatitis B en el mundo valorando el nº de portadores crónicos de AgHBs: a) Endemicidad baja, del 0,1 al 0,5 %: en el norte, oeste y centro de Europa, Norteamérica, Méjico, el sur de Sudamérica y en Australia; b) Endemicidad intermedia, del 2 al 7%: en el Este de Europa, la zona mediterránea, el norte de África, la antigua URSS, parte de Oriente Medio, Asia Central y Sur-oeste asiático, ciertas áreas del Caribe, Centroamérica y Sudamérica; y c) Endemicidad alta, alcanza entre el 8-20%.: en el Sudeste asiático, África tropical, zonas de Oriente Medio, muchas islas del Pacífico y Pacífico Oriental, la mayor parte de la cuenca del Amazonas, Groenlandia, algunas zonas rurales del norte de Canadá y algunas regiones de China.

 

Fuente: CDC, Yellow Book

 

En España, las hepatitis víricas en general son la principal causa de enfermedad hepática aguda y crónica, a pesar de que la incidencia muestra una tendencia descendente. La hepatitis B es una EDO, habiéndose declarado 865 casos en 2010 y 805 en 2011. La tendencia es a la disminución en las últimas décadas, declarándose 114 casos/100.000 habitante en 1985 y ya sólo 14/100.000 en 1998. En los estudios de prevalencia de AgHBs en el conjunto de la población se encuentra en torno al 1,5% y el 60% de los casos tiene lugar entre los 20 y los 39 años, con una proporción varón/mujer es de 2:1.